lunes, 20 de julio de 2009

Caiga quien caiga: Joseph Lewis

Es el millonario detrás del escándalo de la agresión al programa de TV. Su deseo de un aeropuerto propio sublevó a los vecinos de El Bolsón, pero cuenta con el aval del intendente Romera, quien quiso defender el proyecto por mano propia. Los negocios inmobiliarios.
Por Lucas Cremades y Jorge Repiso

A Joe le gusta mirar el mundo desde arriba. Desde la cima de sus 2.200 millones de dólares. Desde su jet privado, ese que lo trae del calorcito de su residencia de Layford Cays en la isla de Bahamas donde pasa la mayor parte del tiempo, al frío patagónico, allá, cerca de El Bolsón, a no más de 30 kilómetros de esa bella comarca andina, donde vive cuatro meses al año; un paraíso que lo cautivó en 1992 cuando un amigo australiano lo invitó a recorrer sus campos. Cuatro años después, el magnate Joe, sexta fortuna privada británica, se daba un gustito: por sólo ocho millones de dólares de su caja chica sumaba a su emporio unas 12 mil hectáreas de rico suelo rionegrino. Aire puro. Aguas cristalinas. Excelente vista. Buen precio. Una postal bucólica de un país generoso.

Joseph “Joe” Lewis vuela y espera. Espera ese día que su jet de 12 plazas lo deje directo, sin escalas ni curiosos, a unos pocos minutos de su finca en Lago Escondido. Pero le falta algo aún para poder lograrlo. Le falta un aeródromo cerca de su Hidden Lake soñado. Lo que no le falta es algún amigo que intente ayudarlo a cumplir con su anhelo.

Oscar Romera es intendente de El Bolsón. Él casi nunca mira al mundo desde arriba. Lo hace a ras del suelo, mira bajito Romera, por la ventana de su despacho municipal, el mismo donde estuvo a nada de trompear al notero/conductor de CQC, Gonzalo Rodríguez, cuando lo entrevistó –o al menos lo intentó– sobre su intención de mudar el aeródromo de El Bolsón, casualmente, unos kilómetros más cerca de Lago Escondido.

Está nervioso el intendente. Es que Lewis, “un campeón” según Romera, nunca lo defrauda. Y ahora, tanto ruido, tanto patotero suelto por la comarca andina, hicieron que la pregunta surgiera inevitable: ¿quién está detrás del escándalo? ¿Quién estuvo desde hace años interesado en que se construyera un aeropuerto en la misma zona de El Foyel donde Romera intenta mudar el aeródromo? Casualmente, Lewis. El magnate que gusta de mirar el mundo desde arriba, desde la lista de los más ricos del planeta de la revista Forbes que lo ubica en el puesto 369; gusta, Joe, de mirar sus miles de hectáreas –con lago milenario de 60.000 metros cuadrados y un bosque virgen de alerces de 4.000 años incluidos– desde un Bell 222. Un espectáculo natural imponente que invita a disfrutar a un viejo conocido fiel, que sube cada tanto al helicóptero para pasear, para sentir el vértigo del poder real; y el intendente Romera va. [...]

Los defensores del magnate se habían instalado en el lugar un par de horas con banderas por demás elocuentes: “Fuera organizaciones que mienten y discriminan”; “No a la discriminación. No a la xenofobia”; “Gracias Lago Escondido por la solidaridad”, y la inolvidable “Gracias Joe”. Las mismas organizaciones convocantes ya habían realizado durante 2008 una movilización similar en la puerta de la Estancia La Primavera, propiedad de Ted Turner, otro magnate que se adueña de una porción de la Patagonia.

Lago Escondido “donó” a la provincia de Río Negro “un cinco por ciento de la propiedad” para la construcción de un camino que le permitiera acceder a los vecinos al lago. En verdad, es un sendero de montaña extremadamente peligroso, sobre el cual el gobierno provincial nunca hizo una mejora, dejándolo prácticamente inestable. El camino principal es privado y custodiado por la empresa Hidden Lake. Sólo se accede con permiso o concertando visitas guiadas que se realizan dos veces por semana.


La FM Activa fue una de las voces que sonaron más fuertes contra la mudanza del aeródromo hasta que el fuego consumió sus instalaciones. Los peritajes determinaron que el incendio fue intencional. Qué se denunciaba desde la emisora: el suculento negocio de 250 millones de pesos que dejaría el loteo y la venta de las 63 hectáreas que dejaría disponible el aeropuerto cuando las autoridades municipales pudiesen concretar su traslado.

Bastó que el notero de CQC preguntara sobre este punto para que Romera estallara de ira. Impotente, sólo pudo responder por el diez por ciento de las hectáreas que estaría destinado a la construcción de viviendas.

¿Y el resto del predio?
No hubo respuesta. Romera le saltó al cuello a Gonzalito. Papelón y rating. Y mucho nervio. Tanto que la vocera de Lewis, Dalila Pinacho, se preocupó por aclarar ante Veintitrés que Joe, en esta bravuconada de político violento, no tuvo nada que ver.

“Vincular a Joe Lewis con Romera fue un invento de CQC y de ese tipo de periodismo. A nadie de aquí se le hubiera ocurrido esa nota. Nunca tuvimos que ver con el aeropuerto del que se habla. Hace años se compró una propiedad para construir una pista privada de uso público pero repito, no hay relación entre el traslado del viejo aeródromo y Lago Escondido.”

Pinacho desvió la atención hacia otro dueño de la Patagonia: “Lewis posee sólo doce mil hectáreas y (Luciano) Benetton un millón doscientas mil. Por qué se meten con Joe que tiene la décima parte de lo que tiene Benetton”. Podría haber agregado que Douglas Tompkins cuenta con casi 200 mil y Ted Turner con unas 50 mil. Veintitrés ya lo contó hace tres años, pero siempre es bueno recordarlo.

Sigue Pinacho: “En cuanto a los incidentes de marzo, se trató del reclamo de unas veinte personas que responden a la izquierda y tiene que ver con intereses políticos. En esa ocasión, 250 vecinos salieron a defender la propiedad y según el intendente, él se puso del lado de los vecinos”.
Pinacho no se privó de defender a su jefe, poner el foco sobre Benetton, hacer un poco de macartismo sobre los manifestantes y ejercer de vocera hasta del mismísimo Romera.
Otra gentileza de Lewis.

Ya lo decían los carteles: “Gracias Joe”.

Fuente (& nota completa): El Argentino