martes, 1 de abril de 2008

Todo según lo esperado

Pergolini confirmó que será el último año del trío de conductores. Lo demás fueron la actualidad y las secciones clásicas.

EL PRIMERO DEL ULTIMO SEGUN JUAN DI NATALE, EL PRIMER PROGRAMA DEL ULTIMO AÑO DE "CQC".










La mayor, y única, novedad del inicio de la duodécima temporada de CQC (martes a las 23.15 por Telefé) ocurrió fuera del programa y días antes. El anuncio de que este habrá de ser el último año en que el trío de conductores, integrado por Eduardo De la Puente, Mario Pergolini y Juan Di Natale, esté al frente del ciclo fue ratificado por Pergolini en la apertura misma del programa. Confirmación que no incluyó ninguna otra señal sobre el/los futuro/s conductor/es.

Bastaron tan solo 75 segundos para que la música de AC/DC, la cámara yendo y viniendo, los anteojos negros, la gráfica de pantalla siempre impactante y una nueva escenografía sobre la misma planta de siempre, sumergieran al espectador en la ya clásica atmósfera zumbona de este "resumen semanal de noticias".

Un resumen que empezó con el pinamarense Porretti, y todos los chistes imaginables de sentido único sobre su apellido, y terminó con el cacerolazo en Plaza de Mayo, que bien podría haber auspiciado Lacoste, a juzgar por la proliferación de chemises que había.

También hubo tiempo y lugar para cubrir los piquetes rurales, el recuerdo de los 32 años del golpe militar de 1976, y la reorganización del PJ con una sorprendente revelación de Alberto Fernández sobre el programa: "Ustedes trabajan para Macri". Aunque no sería la única de la noche. Por Pergolini también nos enteramos, en su comentario -muy crítico con el tono del discurso de la Presidenta- sobre el conflicto gobierno-campo que "también me quejo de toda esa gente que dice 'estos tienen 4x4 y eso no es pueblo', y el pueblo es todo". Porque cuando Pergolini habla en serio, agarrate.

El resto fue el clásico "Top Five de la Televisión", con el japonés que pela una banana con el trasero al tope del ranking, y un "Proteste ya" a cargo de Gonzalo Rodríguez, que se montó en una silla de ruedas para demostrar que la ciudad y sus transportes públicos no están preparados para los discapacitados. Una idea típica de Chiche Gelblung, pero hecha con un poco más de gracia.


Por: Luis María Hermida
Fuente: ESPECIAL PARA CLARIN
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El día que a vos se te ocurra algo así, hablamos y criticamos eh. Por si no lo notaste, periodista, el programa nuevamente vuelve a ser un éxito, y ya que hablamos de formatos que mucho no renuevan.. ¿por qué no criticás algo del cabezón? Así cualquiera eh ;D